¿LEIRE?: ¡UN DIEZ!

Hemos podido leer en algunos medios de comunicación que “el Partido Popular en la Comunidad Valenciana piensa examinar a Leire Pajín para ver si es apta para ser senadora territorial” por nuestra Comunidad. Después de unos primeros momentos de alucine, se da cuenta uno de que estos del PP valenciano son todos iguales, desde Vinaroz hasta Guardamar, pasando por Benidorm. ¡Qué cara más dura tienen!. O sea que pretenden comprobar si Leire defiende nuestros intereses. Pues miren ustedes, Leire los defiende desde siempre, más que algunos que se llenan la boca de valencianismo, y si hay que ponerle nota, la mayoría de los ciudadanos le pondríamos ¡UN DIEZ!: Ampliación de la Depuradora, arreglo de todo el litoral tras las lluvias de Octubre (Playa Tio Ximo, Punta Canfali, Playa Mal Pas, Paseo Tamarindos, etc.), desdoblamiento de la Carretera Nacional, segunda fase del Paseo de Poniente (esto les va a doler), nueva Terminal del Aeropuerto e impulso a la llegada del AVE (¿O es que esto no afecta a Benidorm?), convenios de TURESPAÑA para potenciar nuestro Turismo, etc. etc. etc. Además de su apuesta personal para que una subsede de la Casa del Mediterráneo se ubique en Benidorm. Y estos son sólo algunos ejemplos de su trabajo sólo para nuestra Ciudad. Pero podemos describir todo lo bueno que ha hecho por la Comunidad Valenciana. Por cierto ¿Qué han hecho por este municipio Federico Trillo, Paco Murcia o ahora Agustín Almodóvar?. Se lo digo yo: nada de nada. Si examinamos a éstos, el resultado será un cero patatero. Pero dicho esto, debo retomar mi análisis sobre la cara dura que tienen los dirigentes del Partido Popular al impedir que Leire ocupe ya su escaño de Senadora. La mezquindad y la podredumbre en la que se mueven les hace personalizar hasta la venganza la legítima tarea del adversario político. Es la doble vara de medir de los Populares, que lejos ni siquiera de ruborizarse por la “chorizada” del Caso Gürtel, o la poca vergüenza de Calpe, La Vila, Denia o la Vall de Laguar (en los cuatro casos por intereses económicos o urbanísticos) y donde, desde el primer momento, trabajaron en la sombra para “comprar” esas voluntades, sacan pecho, chulean, y hablan de ética y moral. Son sus armas, las armas del Partido Popular y que son en muchos casos malas personas, ruines, soberbios y prepotentes. Y con esas armas, gobiernan, consiguen y mantienen gobiernos. Y nosotros, los del PSOE, como siempre, a morirnos de responsabilidad, a llenarnos de ética y moral, aunque no provoquemos nada y nos caiga llovida del cielo. Amén.